La gigante petrolera italiana Eni reafirmó su compromiso con la producción de gas en Venezuela, a pesar del complejo panorama generado por las sanciones internacionales impuestas al país. Así lo aseguró el CEO de la compañía, Claudio Descalzi, en declaraciones recientes, destacando el rol crucial de Eni como el principal proveedor de gas para el mercado venezolano.
Descalzi reveló que la empresa se encuentra en conversaciones activas con las autoridades de Estados Unidos para establecer un marco operativo que les permita continuar sus actividades en el territorio venezolano. La peculiaridad de la situación radica en que, debido a las sanciones que restringen las transacciones en dólares, Venezuela realiza los pagos a Eni a través de productos que, a su vez, son destinados al mercado estadounidense.
«Seguiremos produciendo. Estamos hablando con los Estados Unidos para encontrar una manera de hacerlo porque nos pagan con productos que van al mercado estadounidense», explicó el alto ejecutivo, mostrando un tono optimista sobre la posibilidad de mantener la operatividad de la empresa en el país sudamericano.
La postura de Eni contrasta con las críticas vertidas por la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, hacia las sanciones impuestas por Estados Unidos contra otras empresas del sector, como Chevron. Rodríguez señaló el perjuicio que estas medidas ocasionan no solo a la economía venezolana, sino también a las propias compañías estadounidenses con intereses en el país.
La continuidad de la producción de gas por parte de Eni se presenta como un factor fundamental para el suministro energético interno de Venezuela, especialmente en un contexto de desafíos económicos y restricciones internacionales. La empresa italiana se mantiene como un actor clave en el sector hidrocarburos venezolano, navegando en un escenario geopolítico complejo.