A las desoladoras imágenes que llegan desde el estado de Texas, donde el río Guadalupe creció unos ocho metros en 45 minutos y provocó unas inundaciones repentinas que hasta el momento han dejado decenas de muertes, se suma el drama y la angustia de varias familias que buscan a sus hijas desaparecidas en medio de la catástrofe.
Al momento, voluntarios y autoridades buscan a 11 niñas que participaban de un campamento de verano cerca del río y que fueron sorprendidas por la repentina crecida.
Juguetes, ropa, colchones y toallas riegan el césped -o lo que queda de él- entre los restos de las cabañas del Camp Mystic, invadidas por el barro y el agua provenientes del Guadalupe descontrolado por las copiosas lluvias que provocaron el descomunal incremento de su cauce.
Entre las niñas que son buscadas por rescatistas, sus familias, y hasta algunas de sus compañeras de curso, destaca una historia. Es la de Blakely McCrory.
Blakely tiene 8 años y hacía cinco días que había arribado al campamento cuando irrumpió la inundación, según contó su abuelo, E. Douglas McLeod. La familia tiene una tradición de casi 100 años asistiendo a campamentos de verano en el condado de Hill, y el mismo abuelo recordó que fue en un baile durante un campamento que él conoció a quien a luego sería su esposa.
Blakely, la integrante más joven del clan familiar, estaba muy emocionada por poder ir al campamento y así incorporarse a la tradición familiar. “Quería seguir nuestros pasos”, recordó el abuelo, que describió a su nieta como una niña “precoz y muy dulce”.
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“Estamos rezando por que ocurra un milagro”, dijo el hombre, que también recordó que hace dos meses el papá de Blakely, Blake McCrory, murió de un ataque al corazón.
La búsqueda de las desaparecidas ha despertado la solidaridad de cientos de personas, que de una manera u otra intentan colaborar para encontrarlas. Tal el caso del beisbolista de los Red Sox Alex Bregman, que publicó una foto de Virginia Hollis en su cuenta de X.
Poco se sabe del resto de las niñas, todas entre 8 y 9 años. En las últimas horas algunos cuerpos han aparecido y se trabaja para confirmar que se trate de alguna de las reportadas como desaparecidas.
Hadley Hanna, una niña de 8 años de Dallas, es otra de las niñas desaparecidas. Su madre declaró a WFAA en Dallas que el viernes recibió una llamada del campamento informando de la desaparición de su hija.
Greta Toranzo, de 10 años, es otra de las niñas que estaban en el campamento y continúa desaparecida.
«Por ahora, Greta sigue desaparecida. Alentamos a cada uno a seguir compartiendo su foto y a seguir enviando energía positiva a sus amigos y familia en este momento. Familia Toranzo, sepan por favor que la comunidad de la escuela primaria Elementary los lleva en el corazón”, publicó en sus redes sociales el colegio al que asiste la niña.
Another girl confirmed missing by family – Kellyanne Lytal of San Antonio@FOX4pic.twitter.com/I7YfEe2PZu— Peyton Yager (@peytonyager)July 4, 2025
Por su parte, el Wilchester Elementery, un colegio de Houston, invitó a su comunidad de alumnos y familias a colocar moños verdes en los árboles de su campus en honor a Molly DeWitt, alumna de la escuela que sigue sin aparecer.
Además de las niñas que participaban del campamento y están desaparecidas, entre aquellas personas que son buscadas figura una empleada del Camp Mystic.
Katherine Ferruzzo, de 19 años, es de Houston y trabajaba en el Camp Mystic como coordinadora de grupos. Recientemente graduada en la secundaria Memorial, tenía planeado asistir a la Universidad de Texas para especializarse en educación de la primera infancia.
BPO