Un ataque de Israel con drones sobre la Franja de Gaza mató este martes al menos a 51 palestinos murieron mientras esperaban a un convoy de camiones con ayuda humanitaria. Otras 200 personas resultaron heridas, según informaron el Ministerio de Salud de Gaza y un hospital local.
Testigos palestinos dijeron a The Associated Press que las fuerzas israelíes llevaron a cabo un ataque aéreo en una casa cercana antes de abrir fuego hacia la multitud en la ciudad sureña de Jan Yunis.
«Drones israelíes dispararon contra la gente. Minutos más tarde, tanques israelíes lanzaron varios obuses, lo que causó un gran número de mártires y heridos», afirmó el portavoz de Defensa Civil del enclave palestino, Mahmud Basal. El ejército israelí dijo a AFP que está «analizando» el incidente.
El suceso no parecía estar relacionado con una nueva red de entrega de ayuda apoyada por Israel y Estados Unidos que se lanzó el mes pasado y que ha estado marcada por la controversia y la violencia.
Yousef Nofal, un testigo presencial, dijo que vio a mucha gente inmóvil y sangrando en el suelo después de que las fuerzas israelíes abrieran fuego. «Fue una masacre», dijo, agregando que los soldados siguieron disparando a las personas mientras huían del área.
Palestinos heridos en un ataque israelí en el sur de Gaza son atendidos en un hospital local. Foto: REUTERS
Mohammed Abu Qeshfa dijo que escuchó una fuerte explosión seguida de disparos intensos y bombardeos de tanques. «Sobreviví por un milagro», dijo.
Los muertos y heridos fueron llevados al Hospital Nasser de la ciudad, que confirmó la cifra.
Samaher Meqdad estaba en el hospital buscando a sus dos hermanos y un sobrino que habían estado en la multitud que esperaba la entrada de los camiones de la ONU y de otras organizaciones de ayuda humanitaria, que llevaban los alimentos y medicamentos que necesitan en la Franja, devastada por la guerra desde el 7 de octubre de 2023.
“No queremos harina. No queremos comida. No queremos nada”, dijo. “¿Por qué dispararon a los jóvenes? ¿Por qué? ¿Acaso no somos seres humanos?”.
Los palestinos dicen que las fuerzas israelíes han disparado repetidamente contra multitudes que intentan llegar a puntos de distribución de alimentos administrados por un grupo de ayuda respaldado por Estados Unidos e Israel desde que los centros abrieron el mes pasado. Funcionarios de salud locales dicen que decenas han sido asesinados y cientos resultaron heridos.
En esos casos, el Ejército israelí ha reconocido haber hecho disparos de advertencia a personas que, según dijo, se acercaron a sus fuerzas de manera sospechosa.
Israel acusa a Hamas de «desviar» la ayuda
Israel dice que el nuevo sistema operado por un contratista privado, la Fundación Humanitaria de Gaza, está diseñado para evitar que Hamas desvíe la ayuda para financiar sus actividades milicianas.
Las agencias de la ONU y los principales grupos de ayuda niegan que haya un desvío importante de ayuda y han rechazado el nuevo sistema, diciendo que no puede satisfacer las crecientes necesidades en Gaza y que viola los principios humanitarios al permitir que Israel controle quién tiene acceso a la ayuda. Los expertos han advertido sobre una hambruna en el territorio que alberga a unos 2 millones de palestinos.
Familiares de víctimas del ataque israelí en Khan Younis, en la Franja de Gaza, se agolpan frente al hospital, este martes. Foto: REUTERS
La red administrada por la ONU ha entregado ayuda en toda Gaza durante los 20 meses de guerra entre Israel y Hamas, pero ha enfrentado grandes obstáculos desde que Israel relajó un bloqueo total que había impuesto desde principios de marzo hasta mediados de mayo.
Funcionarios de la ONU dicen que las restricciones militares israelíes, el colapso del orden público y los saqueos generalizados dificultan la entrega de la ayuda que Israel ha permitido ingresar.
La campaña militar de Israel en respuesta al ataque terrorista de Hamas el 7 de octubre de 2023 ha matado a más de 55.300 palestinos, más de la mitad de ellos mujeres y niños, según el Ministerio de Salud de Gaza, controlado por el grupo extremista. Su conteo no distingue entre civiles y combatientes.
Israel lanzó su campaña con el objetivo de destruir a Hamas después del inédito y salvaje ataque en el sur de Israel, en el que los militantes mataron a alrededor de 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomaron a otros 251 como rehenes.
Los milicianos aún retienen a 53 rehenes, menos de la mitad de ellos vivos, después de que la mayoría de los demás fueran liberados en acuerdos de alto el fuego.
Fuente: AP y AFP