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El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, se mostró en contra de los comentarios emitidos por diversos mandatarios latinoamericanos con respecto a las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio en Venezuela.

A través de su cuenta de “X”, el jefe del Parlamento respondió a una publicación del periodista Orlando Avendaño.

En dicho tuit, el periodista afirma que el ánimo con respecto a la líder opositora, María Corina Machado, “es insurreccional”, y que las elecciones libres hay que “imponerlas”.

Ante esto, el parlamentario aseguró que dicho testimonio es la “revelación” de un plan magnicida, y preguntó a Gustavo Petro, presidente de Colombia; Lula Da Silva, mandatario de Brasil; y José Mujica, expresidente de Uruguay, si conocen estos supuestos planes, luego de sus críticas al Gobierno venezolano.

¿Aceptarían en sus países planes para atentar contra el presidente como los que hemos develado en numerosas oportunidades? ¿Saben que la organización fascista Vente Venezuela jamás solicitó ser inscrita como partido político ni existió postulación por iniciativa propia alguna? Es decir, jamás se inscribió ese partido en el CNE ni buscaron la inscripción por iniciativa propia”, expresó Rodríguez.

Además, resaltó que existen 13 candidatos postulados para los comicios electorales que definirán al próximo presidente del país.

“¿Desconocimiento? ¿Ignorancia? ¿Miedo? No nos metemos en los asuntos de nadie. Métanse sus opiniones por donde les quepan”, declaró el presidente de la Asamblea Nacional.

En un comunicado emitido el pasado martes, la Cancillería de Colombia expresó su “preocupación” por las “dificultades que enfrentaron sectores mayoritarios de la oposición” al intentar postular a sus candidatos, en referencia al caso de Corina Yoris, representante de la inhabilitada Machado.

Por su parte, Lula catalogó como “grave” el episodio vivido con Yoris, y afirmó que “no tiene explicación jurídica ni política prohibir a un adversario ser candidato”.

Por último, Mujica se refirió al gobierno de Nicolás Maduro como un “régimen porfiado que no respeta las leyes de la democracia”.