La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, advirtió sobre la amenaza que representa para la paz en la región el «afán guerrerista» del presidente Guyana, Irfaan Alí, a quien consideró una versión caribeña del dirigente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
«Venezuela repudia el afán guerrerista de Irfaan Alí, quien se erige como el Zelenski caribeño al amenazar la tranquilidad y la paz de nuestra región para venerar a sus amos estadounidenses y de la ExxonMobil«, indicó la vicepresidenta Delcy Rodríguez en la red social X.
La funcionaria hizo este comentario en alusión a una declaración de Alí durante la botadura oficial del Buque patrullero «GDFS Shahoud», donde anunció un incremento en el presupuesto militar de Guyana para la compra de botes y aviones con el apoyo de sus socios internacionales.
El mandatario guyanés argumentó que el principal propósito es salvaguardar la soberanía e integridad territorial de su país, incluyendo las aguas por delimitar con Venezuela.
Al respecto, Venezuela reiteró el martes su llamado a Guyana a dialogar para lograr un acuerdo «efectivo» entre las partes, en torno a la controversia territorial sobre el Esequibo.
El pronunciamiento lo realizó el representante permanente de Venezuela ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Samuel Moncada, desde la Corte Internacional de Justicia (CIJ), en el contexto de una reunión convocada para discutir los próximos pasos del proceso impulsado por Guyana ante esa instancia.
Las tensiones entre Caracas y Georgetown aumentaron después de que Guyana recibiera ofertas por ocho de los 14 bloques petrolíferos que salieron a licitación en diciembre de 2022, y entre las que se encuentra la empresa ExxonMobil.
Venezuela consideró dicha situación una confabulación de EEUU con la ExxonMobil para despojar al país de sus derechos sobre el territorio.
Desde hace más de 100 años Venezuela y Guyana mantienen un diferendo sobre la soberanía de la Región del Esequibo, que abarca unos 160.000 kilómetros cuadrados al oeste del río Esequibo y posee grandes reservas de petróleo.
En 1966, ambas naciones firmaron un acuerdo para buscar una solución pacífica a esta disputa, pero Guyana introdujo en 2018 una demanda ante la Corte Internacional de Justicia en la que pide al tribunal validar legalmente el laudo arbitral de 1899 que le da control absoluto sobre el territorio.