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Especial.-

Como es tradición cada 11 de septiembre, cientos de feligreses se concentraron en el Campo de la Coronación en Guanare, para ser parte de la eucaristía en ocasión de los 72 años de la Coronación Canónica de la Virgen de Coromoto como Patrona de todos los venezolanos.

El Obispo de la Diócesis de Guanare, Owaldo Araque, encabezó la hermosa y emotiva homilía, donde sobraron para la Virgencita alabanzas, oraciones y canticos de agradecimiento por su bondad, su infinita misericordia y profundo amor para cada uno de sus hijos. «Ella es un orgullo para el pueblo venezolano, es sencilla, humilde, amorosa, cercana, la máxima colaboradora de su hijo en la redención de la humanidad».

«Que desde esta fiesta nazca la alegría y esperanza en sus corazones para dar cada día razón de nuestra fe… revisemos nuestra fe para ver donde está puesta nuestra mirada; en el regazo de nuestra madre ponemos nuestras preocupaciones, dolores y sufrimientos para recobrar la fortaleza y caminar firmes en la fe, la alegría y la esperanza fuertes en la caridad y en el servicio. Nuestra vida en la fe no puede estar separada del amor al prójimo», dijo el Obispo.

En sus palabras, agradeció a todos los fieles, los devotos, amigos, autoridades, a todos, sin distinción, por su afecto, por como hermanos estar a los pies de María de Coromoto. «Ella, la llena gracia, sin pecado original, convencida y colmada de dichas, ella, la madre virgen que cumplió la palabra del señor y acompañó a su hijo, reina gloriosa al lado de Cristo fue enviada como misionera de salvación… Ella vino a caminar con nosotros y podemos decir que queremos caminar con María».

El Obispo dijo que la Virgen vino para indicarnos el  sendero de la vida, la justicia, la paz, la fraternidad, la convivencia y la salvación en esta vida y en la vida eterna, por tanto hay que agradecer al señor concedernos su maravillosa visita y esta devoción que hoy palpita en cada corazón. «Gracias a Dios por tan espléndida obra de su amor, gracias, Dios eres digno de toda alabanza y adoración, nos regalaste a María y también la fe, gracias por tus obras maravillosas Señor».

En la celebración, estuvieron presentes junto a los fieles y devotos, autoridades civiles y militares, quienes participaron con alegría en la celebración. «A todos nos arropa un mismo amor, el amor de Dios y el amor de Maria».